Que es la inflación y sus causas: Inflación: estas son las causas y herramientas para combatirla

Si las empresas especulan una subida del precio de un factor importante en su proceso productivo y deciden subir paulatinamente sus precios, se produce una inflación denominada autoconstruida. El principal efecto negativo de la inflación es que erosiona el poder adquisitivo de los ciudadanos. Al subir los precios, podemos comprar menos cosas con la misma cantidad de dinero.

Es una subida de precios que superan el 3-4% pero no llegan al 10% anual. Si es un fenómeno temporal no es un problema importante, pero si persiste en el tiempo la erosión que produce en los ahorros también es muy fuerte. Suele venir provocada por grandes cambios económicos en un país y se produce cuando se alcanzan niveles de inflación de 2 o 3 dígitos en un plazo, normalmente, de un año.

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Aunque esto en principio suene como algo bueno, lo cierto es que también, puede generar otros tipos de consecuencias. Ya que, al detener la demanda del país, se frena también la industria que elabora los productos. Por lo tanto, es una acción correctiva que podría generar un estancamiento económico.

Es entonces cuando la inflación aparece y el consumidor nota cómo su poder adquisitivo cae. Ahora deberá gastar más dinero que el que invertía antes para obtener la misma cantidad de bienes y servicios. La historia económica, sobre todo la anglosajona, cuenta que la inflación vuelve a niveles normales en un tiempo de un año y en casos extraordinarios, dos.

Las expectativas de una mayor inflación y aumentos de precios también pueden causar inflación, ya que los hogares pueden exigir salarios más altos. Puede ser que el banco central de un país haya impreso demasiados billetes. Otra razón puede ser que la demanda de bienes y servicios sea inusualmente grande, mayor de lo que las empresas tienen tiempo para satisfacer. Los costos más altos de producir bienes y servicios también pueden elevar los precios y, por lo tanto, también aumentar la inflación. Para poder definir este concepto lo primero que debemos saber es que es un término que está directamente relacionado con los precios de los bienes o servicios de un país.

La inflación descontrolada puede ocurrir cuando la demanda es mayor que la oferta durante mucho tiempo. Esto significa que las personas necesitan salarios más altos para poder comprar los bienes y servicios que utilizan habitualmente, lo que a su vez lleva a que las empresas tengan que subir los precios para poder pagar salarios más altos, etc. Para mantener el equilibrio en la tasa de inflación en una región concreta, las instituciones monetarias y gubernamentales supervisan continuamente la evolución económica en la zona. En función de los datos obtenidos, se pueden desplegar políticas monetarias o fijar leyes de control fiscal que contribuyan a estabilizar la tasa de inflación en niveles adecuados para el óptimo desarrollo de una economía.

Sin duda, la inflación genera graves repercusiones a nivel social, productivo e incluso psicológico. Ya que las personas se acostumbran a tener un constante temor y estrés debido a no poder cubrir satisfactoriamente los gastos del hogar. En este contexto, para dar respuesta a la subida de salario de los trabajadores y mantener los márgenes de ganancias, las empresas trasladan los costes a los consumidores, incrementando los precios. La inflación autoconstruida a aquella que se produce de manera anticipada y que puede hacer entrar en un “círculo vicioso”. Este tipo de inflación es común en algunos países en los que hay una inflación muy alta. Es entonces cuando los trabajadores piden un aumento en su salario para intentar contrarrestarla, lo que a su vez produce una subida de los precios que establecen los empresarios.

Afecta a los hogares con menores rentas de forma desproporcionada

La gran crisis financiera de 2008 llevó a los grandes bancos centrales a reducir los tipos de interés hasta niveles cercanos a cero, o incluso, negativos, para estimular la economía. Esta situación se mantuvo para paliar los efectos de la crisis sanitaria, explica David Cano, socio de Analistas Financieros Internacionales (AFI). Por ejemplo, que una entidad financiera cobraba (a través de los intereses) muy poco por pedir capital prestado (un crédito) a una empresa o un particular.

Cuando un gobierno tiene déficit fiscal, puede optar por financiarlo a través del endeudamiento (puede hacerlo con una reducción de las reservas internacionales o imprimiendo moneda). Al imprimir moneda se produce un aumento de la oferta de dinero mientras la demanda del mismo se mantiene estable, lo cual implica un exceso en la oferta. Esto genera un problema grave que, de no ser solucionado por el gobierno, provocará que el Banco Central devalúe la moneda, derivando a una inflación en la economía. Además de esto, también cabe señalar que la capacidad de ahorro de los ciudadanos disminuye de forma notable, al tener que gastar más dinero para adquirir los mismos productos. Del mismo modo, las personas se ven en la obligación de comprar todo lo que necesitan de manera presurosa, pues temen que al día siguiente los precios ya hayan aumentado.

La política monetaria es diseñada por los bancos centrales para cumplir con este objetivo y una de las principales herramientas que utilizan los banqueros centrales para mantener la inflación bajo control es el manejo de los tipos de interés. Aquí la subida de precios se queda entre el 2% y el 4%, que está por encima de lo que los economistas consideran ideal para el crecimiento económico, pero no demasiado. Se considera que en estos niveles los bancos centrales tienen suficientes armas para actuar y llevar este nivel de inflación a una zona de control. La inflación afecta el valor presente de los futuros flujos de dinero que producen los activos financieros.

Inflación por costes

Otra situación que puede darse en un escenario de inflación por costes o por demanda es que los empleados soliciten un aumento de sueldo a las empresas. Se considera que una inflación controlada es beneficiosa para la economía de un país, principalmente para evitar posibles situaciones de deflación. En el caso de que el IPC superara el 10 por ciento pero estuviera en cifras manejables, se considera inflación moderada. En el caso actual, el Fondo Monetario Internacional (FMI) apunta que la inflación mundial descenderá del 8,7% de 2022 al 6,8% en 2023 y al 5,2% en 2024.

Sin embargo, si la inflación se descontrola y aumenta de forma dramática, puede llegar a destruir una economía. Una inflación desmesurada provoca un aumento del coste de vida, genera incertidumbre generalizada, frena la productividad de las empresas, resta capacidad adquisitiva al consumidor y aumenta la desigualdad en los hogares. Ante la depreciación del valor de la moneda, los consumidores persiguen un retorno de su capital, buscando mejores rendimientos y comprando en lugar de guardar el dinero y ver cómo disminuye su valor. En consecuencia, se impulsa la actividad empresarial y el crecimiento económico del país.

Otras posibles causas que pueden provocar inflación

Entender este tipo de conceptos básicos es fundamental para asentar las bases de conocimiento sobre economía, así como medir el crecimiento de un país como es el caso de este concepto. Una de las tragedias de la inflación es que afecta a la gente con menores ingresos de forma desproporcionada. Aquellos que gastan una proporción más alta de sus ingresos generales en necesidades básicas tienen menos margen para paliar el efecto de la inflación en su día a día. Si nos fijamos en Estados Unidos, la tasa de inflación anual ha tenido una media del 3,2%, por tanto, un grado moderado de inflación ha sido lo más habitual durante la mayor parte de la historia económica moderna (1914 a 2022). Y, como referencia temporal más cercana, en la década de los 90, la tasa media de inflación fue del 2,5%.

Esta erosión del poder adquisitivo es uno de los efectos más perversos de la inflación y la principal causa de que la inflación de más de 10% interanual que sufrimos en 2022 preocupe tanto a los economistas. Cuando el IPC aumenta, los gobiernos aumentan los salarios para contrarrestar la disminución del poder adquisitivo (como ocurre con las pensiones o los funcionarios en España) y suben los impuestos para poder afrontar estos pagos. Saber qué es la inflación en economía permite a las empresas idear estrategias que limiten las consecuencias negativas en las mismas. Asimismo, en esta situación, notamos que con el mismo dinero que invertimos la semana anterior, podemos adquirir menos productos. Como resumen, mismo dinero con menor valor y, disminución del poder adquisitivo del consumidor.

Una vez tenemos claro qué es la inflación y los diferentes tipos, lo más interesante es conocer el por qué se produce. Aunque a lo largo de los años ha habido cierta “controversia” sobre el motivo, lo cierto es que se puede producir por varias situaciones o contextos que suceden en un país en un momento determinado. Vamos a intentar explicar de la manera más sencilla posible qué es la inflación, cuáles son las causas que la provocan, los tipos y cómo afecta a la macro y la microeconomía, es decir, a nuestro día a día. Uno de los aspectos preocupantes de la inflación es que cuando se descontrola, puede crear una espiral muy peligrosa difícil de romper. Uno de los aspectos importantes de las economías modernas es la inclusión de las expectativas de los agentes económicos. Además, suelen tener menos porcentaje de su patrimonio en activos que tradicionalmente han servido como protección frente a la inflación, como los activos inmobiliarios.

Es la variación de ese índice entre dos momentos del tiempo lo que arroja el dato de inflación. Aunque afortunadamente no hay muchos casos en la historia de las economías avanzadas, cuando se ha producido la hiperinflación ha sido uno de los fenómenos económicos más devastadores para una sociedad. La inflación se mide a través de una fórmula matemática que establece la variación de un índice en un período de tiempo, expresado en porcentajes. El IPC es el sistema más utilizado en el mundo porque emplea los cambios de precio experimentados por los productos esenciales, por lo que el resultado es bastante cercano a la realidad. No incluye productos energéticos ni alimentos perecederos porque sus precios son muy variables y pueden distorsionar el resultado.

Qué es la inflación subyacente

Puedes comenzar por invertir 1.000 euros por ti mismo o, lo que es más recomendable, buscar la guía y el conocimiento de asesores financieros que te ayuden en la búsqueda de los fondos de inversión o los productos más adecuados para ti y tu situación. Los fondos de inversión son los mejores enemigos de la inflación, ya que nos permiten obtener rentabilidad por nuestro dinero haciendo que no se devalúe con el paso del tiempo al tenerlo parado. El precio de las mascarillas al inicio de la pandemia, cuando su demanda era mayor a su oferta.

Hiperinflación

De esta forma, se buscaba estimular el consumo y la inversión y tener un impacto positivo en el crecimiento económico. Las empresas deben mantener sus beneficios en todo momento, por lo que un aumento del precio de cualquier factor que influya en sus costes de producción provocará una inmediata subida en el precio del bien o servicio final. Para que un fenómeno así derive en una inflación, algún factor clave para la producción de cualquier empresa debe sufrir algún tipo de impacto, como puede ser una subida radical del precio por causas políticas.